domingo, 5 de octubre de 2008

PLACERES


No hay placeres que sean malos en sí mismo.
Lo que es malo son las desagradables consecuencias que pueden resultar si no se usa la cabeza cuando se decide que placeres perseguir y cuáles evitar.
EPICURO(341-270 a de C.)

1 comentario:

b dijo...

Sí, asi es... Por suerte o por desgracia es el cerebro el que rige hasta los sentimientos. Es una utopía pero se siente de cabeza, luego el corazón y el alma van por donde quieren.
Un abrazo AMASEJMET.