¡Hola!
Qué bueno poder tener este medio para hablar contigo.
No voy a empezar mi carta con el clásico: "Espero que a la llegada de ésta te encuentres bien" porque sé que estás divina: cómo se van perdiendo las viejas formalidades en esta vorágine tecnológica...
No voy a empezar mi carta con el clásico: "Espero que a la llegada de ésta te encuentres bien" porque sé que estás divina: cómo se van perdiendo las viejas formalidades en esta vorágine tecnológica...
Te veo cada noche desde mi ventana, allí, en lo alto, atenta, vigilante, con ese porte altivo, dominante y con ese halo de dulzura que te envuelve.
Nada se escapa a tu mirada...
Nada se escapa a tu mirada...
Debo despedirme, quiero que esta carta salga en el correo de hoy.
Da por seguro que seguiremos hablando, tengo tanto que contarte...
Da por seguro que seguiremos hablando, tengo tanto que contarte...
¡Gracias por velar mis sueños! ♥